Blogia
Viaje a las entrañas

Beatrice

Yo la amaba siempre con el corazón,
hasta cuando no sabía su nombre...
Pero lo supe todavía adolescente.
...Y ella, una niña...
Creo que no pensabamos en el amor.
Nos amabamos, no más.
Y cuando yo la amaba con el corazón,
sabía que ella me respondia con el suyo.

Un día hablabamos así:
-Me llamabas..?
-Siempre! con el corazón.
-Disjiste mi nombre?
-Con los labios no.

Cuando un santo nudo
nos unió, creimos
que habiamos siempre
vivido lo mismo.

...La mano en la mano...
Y un solo camino.


M.M.

0 comentarios