Niña Arco iris
Como si nada te atara a mi te hablodesde el frío de la ausencia,
son tus palabras las que se cansan
tu palpitar el que en remolino de estrellas
abarca mis sueños.
Ya solo me queda luchar o no,
contemplar las noches como antes
y comprender que solo una victoria mía
llenara tu espíritu de agua limpia
Es verdad que no nos conocemos
mañana te llamare para decirte nada
y tu te callaras verdades como horizontes
te tomo aún amiga, en silencio
toda para mi
y dímelo, bájame al infierno de tus llantos,
a la luz de tus ideas,
o déjame aterido en las sombras de tu ausencia.
(4 de marzo de 2002)
Jose Ramón Casanova.
No sé, quizá sea la melancolía que se acerca, o simplemente un día extraño, pero hoy he vuelto a leerte, te encontré abrazándome desde una distancia hiriente, llorando bajo la misma luna a cientos de kilómetros de mi, e intenté explicarme lo que somos, lo que fuimos, y el porqué, pero no pude, más no quiero saberlo, solo sé lo que siento, lo que te he necesitado en estos seis años, y lo que te has convertido para mi. Siempre he pensado que tú eres la única persona que sientes lo que yo siento, que sientes cuando lloro, cuando rio, cuando el amor hace mella en mi, cuando el dolor de la existencia me atrapa, cuando la soledad ahoga, siempre he sabido que haga lo que haga, que diga lo que diga, me entenderías y me apoyarías aún sabiendo que en un futuro no muy lejano me caería, que me dolería, pero aún así tu mano siempre ha estado ahí, curándome heridas incurables, y todo eso solo tú, tú, que te disfrazas de sonrisas inexistentes, que piensas que tu pequeño poeta murió y con él la vida, pero yo sé que no, que ese niño surgirá de unas cenizas que tu creías apagadas y la vida volverá a brotar de tus entrañas. Y hoy mis lagrimas se disfrazan como un beso que quisiera tocarte, sentirte, abrazarte, para que supieras que desde la otra punta de la vida, te espero, sigo necesitando esos abrazos egoístas que te pido a menudo, esas palabras, tu voz. Y todo se resume en que te quiero, en que no quiero que te vayas, no quiero que me olvides, no quiero perderte, aunque jamás te haya tenido, necesito sentirte cerca, aunque sea escondido en la otra esquina de la habitación.
Tu niña Arco iris.
2 comentarios
Nell -
esdll -
pienso en tus silencios como pétalos que caen lentamente/
y yo se que caen hacia arriba, suben al cielo/
porque la tierra no se merece acoger tus lágrimas./
Solo quisiera abrazarte con mis palabras doloridas,/
con palabras solo que no significan nada una a una pero así,/
encadenadamente libres lo son todo porque son yo mismo/
la esencia de aquel niño, un simple hombre, un poeta solitario./
Entre el cielo y la tierra estamos no sabemos porqué pero juntos,/
a una distancia salvadora y dolorosa atados,/
como cuando queremos alcanzar el rostro imaginado en un espejo/
y chocamos con el frío límite de la nada matando una caricia./
Solo quisiera comprender esos latidos sin una forma definida,/
como las mariposas cuando vuelan dibujando en el aire promesas/
y sin ellas susurrarte palabras que no duelan, que no lloren,/
versos llenos solo de alegría que hagan sonreir a tu mirada./
Quisiera robarle a la noche su negra soledad y moldearla a mi antojo,/
para regalarte cada silencio buscado por entre las estrellas/
y que sintieras que hay un espacio a llenar entre cielo y tierra,/
que por momentos es bello, desnudo de razón, mano con mano./
..........
(Entre Cielo Y Tierra, Junio de 2000, hoy, mañana ..)