Powder
Sé que hoy no estoy bien, sé que no debería esconderme en mi cueva y refugiarme entre mi música y mis letras, sé que debería decir todo lo que siento, coger fuerzas de donde sea, pero hoy no puedo, hoy solo me apetece cerrar los ojos, estar conmigo misma, mi música, y no intentar explicarme porque el mundo es tan injusto y yo tan sensible como para que me afecte todo esto como me esta afectando. Pero eso es lo que tiene, encontrarme a mi misma ha supuesto destapar esa cajita de sentimientos que yo había cerrado, no es de ahora mi sensibilidad, afortunadamente, o desgraciadamente (como hoy) siempre ha estado ahí, sintiendo cada pétalo que se abría, cada estrella que caía, cada corazón que se partía... Sentir como yo siento tiene cosas buenas y cosas malas, y hoy y ayer tocaron las malas, para mi no hay nada tan insignificante como para no poder llorar por ello, y más si la cosa en cuestión ha compartido algo de mi vida, por pequeña que sea. Supongo que la gente no comprende él porque se puede llorar por un perro, perra en este caso, cuando solo lleva 4 días en esta casa. En el momento que te pones delante ella, y sientes todas esas ganas de vivir, es imposible no comprender el dolor de su enfermedad. Y es injusto, injusto para quien le toca, siempre pensamos que es demasiada casualidad cuando te dicen que las posibilidades de que ocurra es uno entre 10 millones, pero sabes? Entre esos 10 millones hay uno que sufre, y le ha tocado a Golfa, precisamente a ella, que era la más vital de todos sus hermanos, la más trasto, la que más saltaba, cariñosa, etc. Precisamente a ella le ha tocado nacer con una malformación en el estomago que quizá le robe la vida. Si, es un animal, pero la mayoría de las veces, me merecen mucho más respeto los animales que las personas, y cuando decides tener un animal, no solo tendrás un perro o un gato, sino tendrás un amigo para toda la vida, que no te juzgara para nada, simplemente estará allí cuando le necesites o no, son así de agradecidos, para toda la vida... Y joder!! Me parece injusto, con la cantidad de personas que se quieren quitar la vida, que no quieren vivir, que las personas que realmente quieren seguir adelante no puedan, porque desgraciadamente pasa en el mundo en el que vivimos, nacen cada día niños con una vitalidad increíble que se quedan en el camino... Ojala pudiéramos ser capaces de sentirlo, para así poder coger la fuerza que a veces no falta para poder seguir caminando.
Hay una escena, en la película Powder, cuando el chico vé al ciervo muerto, que a matado el ayudante del serif, y con unos ojos rojos se acerca y le toca con tal delicadeza y con lagrimas en los ojos, y lleno de impotencia agarra la mano del serif y transmite todo lo que siente el ciervo al ayudante del serif, todo ese sufrimiento, agonía, el dolor de la muerte que deja desangrarse poco a poco y sentir que tu corazón lucha por algo y que inevitablemente te parará. Es la escena más fuerte de toda la película, y llore como una descosida cuando la ví, no porque fuera triste, que lo és, sino porque lograron plasmar en unas décimas de segundo lo que siento yo tantas veces y que nadie comprende, es como si dejara de ser yo y fuera lo que estoy mirando, como si su corazón latiera en mi cuerpo, como si fuera el mío el que agoniza, no lo sé, es algo que todavía no logro explicar, la gente que me conoce bien lo sabe, demasiado sensible... Pero sensible no porque me afecte, sino porque siento cada cosa que oigo, que veo, que toco. Cuando duele, no es tan bueno sentir todo multiplicado por 10. Y últimamente todo duele, menos mal que soy capaz de sentir también la vida correr por mis venas, sino volvería a hundirme en medio de la nada. Hoy no sé si dar las gracias por sentir como siento, me esta impidiendo seguir mi vida normal, y lo que es mas importante, no tengo ganas de estudiar, solo me apetece llorar.
Hay una escena, en la película Powder, cuando el chico vé al ciervo muerto, que a matado el ayudante del serif, y con unos ojos rojos se acerca y le toca con tal delicadeza y con lagrimas en los ojos, y lleno de impotencia agarra la mano del serif y transmite todo lo que siente el ciervo al ayudante del serif, todo ese sufrimiento, agonía, el dolor de la muerte que deja desangrarse poco a poco y sentir que tu corazón lucha por algo y que inevitablemente te parará. Es la escena más fuerte de toda la película, y llore como una descosida cuando la ví, no porque fuera triste, que lo és, sino porque lograron plasmar en unas décimas de segundo lo que siento yo tantas veces y que nadie comprende, es como si dejara de ser yo y fuera lo que estoy mirando, como si su corazón latiera en mi cuerpo, como si fuera el mío el que agoniza, no lo sé, es algo que todavía no logro explicar, la gente que me conoce bien lo sabe, demasiado sensible... Pero sensible no porque me afecte, sino porque siento cada cosa que oigo, que veo, que toco. Cuando duele, no es tan bueno sentir todo multiplicado por 10. Y últimamente todo duele, menos mal que soy capaz de sentir también la vida correr por mis venas, sino volvería a hundirme en medio de la nada. Hoy no sé si dar las gracias por sentir como siento, me esta impidiendo seguir mi vida normal, y lo que es mas importante, no tengo ganas de estudiar, solo me apetece llorar.
2 comentarios
Nell -
GreGori -
No estás sola. Besitos