A veces las flores se marchitan, y otras veces la vida...

Es curioso como tú, a veces solo eres una pantalla en mi ordenador, un pequeño espacio en el mundo, y otras, tienes alma, opiniones, abrazos. Pero siempre estás ahí, jamás te aburres de mis problemas, no te cansas de secar mis lagrimas ni de acallar mis llantos. He terminado dándote alma, nombre, espacio, sentimientos, todos menos cuerpo, no puedo abrazarte, pero en realidad a quien puedo abrazar sin que exista un abismo entre nosotros? Unas veces la distancia, otras el miedo, o simplemente, la falta de comprensión, es lo que me separa del resto del mundo, un cruel desierto de sentimientos que cambian como las dunas después de la tormenta, unas veces tan lejos, otras cerca, y la mayoría no están, por eso te inventé, para poder abrazar a la nada pero sabiendo que no hay nada. Es curioso como el pasado viene a recordarme que haga lo que haga, volveré a estar sola, antes eras una hoja de papel, un cuaderno, ahora una pantalla colgada en el cielo a vista de todos, pero que no todos lo ven.